"A la más cara harpía"

Hoy quiero ser un brujo y pintar en la luna

un antifaz más obvio que el hube tallado;

y desandar los pasos para que ninguna

de las mareas, ni tiempos ni pluma

me vuelva a dar un amor terminado.

 

Quisiera con sus pecas, sus ojos de agua,

trazar un firme olvido de frente a mentón.

Y dedicar ya mi canción,

y mi guitarra y mis encantos

para que sonara el cascabel,

y sus besos y su olor quedaran mudos.

Ser yo sin más disimulo.

 

Hacer un viaje hacia mí mismo

sin parón ni sin partida y regreso,

procurarle a mi piel arañones

y desgarros de versos

sin que esos recuerden

que un día me eché hacia el abismo.

 

Antifaz sin más ternura

que mi desnudez

virando hacia la estrella,

mientras el timón

no gira en torno a ella

y a su tempestad.

 

Y en ese claro de vientres:

mi ombligo, el poniente,

ya en medio la arena.

Y ella justito al final,

que parezca sin más,

que nos salió re buena.

 

Y sin miedo hablar de ti,

Como algo que tuve en mí

de una escuela de un noviembre aprobado.

 

Y es que yo quiero hoy ser brujo

y pintarte a la máscara harpía.

A la luna diría que en mi lealtad

no hay cuestión y si enfadas

te lleven las olas.

Y si en tu vida condenas

a otro hombre a guardar tu corazón,

¡Que sus cadenas las lleves sola!

B.